El cuerpo humano es un campo energético que fluye constantemente, y no un conjunto de partes que funcionan al unísono. Todas las enfermedades fisicas tienen su raíz en este sistema energético. El
reiki, un antiguo arte terapéutico por imposición de manos, cuyos orígenes se remontan a los
sutras tibetanos, es un instrumento que nos permite recargar, realinear y equilibrar el campo energético, creando las condiciones necesarias para el funcionamiento integral de los sistemas curativos del cuerpo.
MEDICINA ENERGÉTICA REIKI es el primer libro que enseña cómo se ha ido incluyendo el
reiki dentro del modelo tradicional de atención a la salud.
El sistema sanitario obliga a las instituciones a proporcionar un servicio de alta calidad pero de bajo costo; por ello se ha reconocido que el
reiki es un valioso medio para aumentar al máximo la atención al paciente y reducir al mínimo su tiempo de recuperación. A diferencia de otras terapias complementarias, el
reiki no requiere de tecnología complicada ni de largos entrenamientos. Cualquier disciplina terapéutica puede incorporarlo fácilmente a su especialidad. Médicos, enfermeras, terapeutas de rehabilitación, cirujanos, parteras y anestesistas informan que el
reiki alivia el dolor y acelera la curación. Consejeros y cuidadores estiman que el
reiki da a los enfermos terminales más capacidad física y emocional para sobrellevarlo. Sus relatos hacen pensar que el
reiki es una de las mayores esperanzas de la medicina, con miras a un futuro de curación y bienestar más compasivo.