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El Purgatorio es el segundo de los tres cantos de La Divina Comedia de Dante Alighieri. Lo antecede el del Infierno y le sigue el del Paraíso. El Purgatorio de Dante se divide en Antepurgatorio, Purgatorio y Paraíso terrestre. La estructura moral del Purgatorio sigue la clasificación tomística de los vicios del amor mal dirigido, y no hace referencia a culpas específicas. Se divide en siete giros, en las cuales se expían los siete pecados capitales: soberbia, envidia, ira, pereza, avaricia, gula, lujuria. Al pie de la montaña se encuentra el Antepurgatorio, y en la cima el Paraíso terrestre. Su estructura es especular a la del Infierno, pues si aquel es un abismo este es una montaña, y el orden de las penas sufre un giro de ciento ochenta grados: el camino de Dante va del pecado más grave al más leve (que es la lujuria, o amor que se excede en la medida). Cada giro tiene un custodio angélico, y precisamente los ángeles de la humildad, de la misericordia, de la mansedumbre, de la solicitud, de la justicia, de la abstinencia y de la castidad; en cada giro, además, los que expían las culpas tienen ante sí ejemplos del vicio castigado y de la virtud opuesta.