Standaard Boekhandel gebruikt cookies en gelijkaardige technologieën om de website goed te laten werken en je een betere surfervaring te bezorgen.
Hieronder kan je kiezen welke cookies je wilt inschakelen:
Standaard Boekhandel gebruikt cookies en gelijkaardige technologieën om de website goed te laten werken en je een betere surfervaring te bezorgen.
We gebruiken cookies om:
De website vlot te laten werken, de beveiliging te verbeteren en fraude te voorkomen
Inzicht te krijgen in het gebruik van de website, om zo de inhoud en functionaliteiten ervan te verbeteren
Je op externe platformen de meest relevante advertenties te kunnen tonen
Je cookievoorkeuren
Standaard Boekhandel gebruikt cookies en gelijkaardige technologieën om de website goed te laten werken en je een betere surfervaring te bezorgen.
Hieronder kan je kiezen welke cookies je wilt inschakelen:
Technische en functionele cookies
Deze cookies zijn essentieel om de website goed te laten functioneren, en laten je toe om bijvoorbeeld in te loggen. Je kan deze cookies niet uitschakelen.
Analytische cookies
Deze cookies verzamelen anonieme informatie over het gebruik van onze website. Op die manier kunnen we de website beter afstemmen op de behoeften van de gebruikers.
Marketingcookies
Deze cookies delen je gedrag op onze website met externe partijen, zodat je op externe platformen relevantere advertenties van Standaard Boekhandel te zien krijgt.
Je kan maximaal 250 producten tegelijk aan je winkelmandje toevoegen. Verwijdere enkele producten uit je winkelmandje, of splits je bestelling op in meerdere bestellingen.
En el París de los años ochenta y noventa, una periodista de Libération narra las extraordinarias aventuras de Willie, Doumé y Leibowitz. El primero es un joven provinciano de belleza esplendorosa que llega a convertirse en el rey de la noche gay parisina. El corso Doumé fue amante de Willie y el fundador del primer movimiento de liberación homosexual francés. Leibo, el amante casado de la narradora, es un joven filósofo que empieza situado en la izquierda divina y culmina su carrera en un ministerio. Willie contrae el sida y se convierte en una figura mediática al límite mismo del esperpento, y en enemigo salvaje y desaforado de Doumé. La mejor parte de los hombres es la primera novela de Tristan Garcia, y atrajo poderosamente el interés de la prensa y el público desde el momento mismo de su publicación. Con un estilo directo y un planteamiento ajeno a los géneros autobiográficos en boga, Garcia, que por edad no pudo conocer los años que retrata, es capaz sin embargo de evocar aquella época con una sorprendente eficacia y vivacidad. «Con La mejor parte de los hombres, su primera novela, Tristan Garcia se impone como la revelación literaria del año. Su historia de los años ochenta y noventa, entre el ambiente homosexual y los nuevos filósofos, es un magnífico cuento moral de alcance universal» (Nelly Kaprièlian). «Garcia describe con talento las recomposiciones intelectuales de las dos décadas transcurridas: el último suspiro de las utopías, la conversión de la izquierda al capitalismo, las transformaciones de la militancia, la significación de las fracturas en el seno de la comunidad gay, encarnadas por el odio que se profesan Dominique y William. Con gran valentía se apodera de la historia reciente y ofrece, más allá del destino de sus personajes, una auténtica novela de ideas, algo muy infrecuente en la literatura francesa» (Jean Hurin, Le Magazine littéraire). «En Francia, los escritores raramente se aventuran en el territorio de la historia contemporánea. Tristan Garcia no tiene miedo de hacer una lectura política de los debates que originó el sida en los años noventa. Sabe novelar de manera estimulante aquellos años que creíamos vacíos, feos e inútiles, y de una manera moderna, a la vez divertida, cruel y patética, traza el retrato de unos personajes familiares que nos conmueven casi sin querer» (François Ozon, Les Inrockuptibles). «Una cruel y negra lucidez. Una revelación» (Christine Rousseau, Le Monde). «Una novela intensa y áspera como un alcohol de contrabando» (Claude Arnaud, Le Point). «El nacimiento de un auténtico escritor» (Dominique Fernandez, Le Nouvel Observateur).