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Leopoldo Alas Clarín fue publicando cuentos, de ma¡nera ininterrumpida, desde que empezó a manuscribir en 1868, a los dieciséis años, el diario " Juan Ruiz " . A lo largo de su vida, Clarín se debatió entre el cuento y la novela. Reseñando las narraciones de Palacio Valdés, " Aguas fuertes " (1894), escribía Clarín en 1885 en " El Globo " : " No es más difícil un cuento que una novela, ni tampoco menos; de modo que hay notoria injusticia en considerar inferior el género de narraciones cortas, en el cual por cierto se han hecho célebres muchos escritores an¡tiguos y modernos " . Y en 1892, a propósito de unas reflexiones publica¡das en " La Publicidad " sobre las relaciones entre el periodis¡mo y la cultura, se detiene en " la moda del cuento " , considerando las ventajas y los inconvenientes: " El cuento no es más ni menos arte que la novela: no es más difícil como se ha dicho, pero tampoco menos; es otra cosa: es más difícil para el que no es cuentista. En general, sabe hacer cuentos el que es novelista, de cierto género, no el que no es artista. Muchos particulares que hasta ahora jamás se habían creí¡do con aptitudes para inventar fábulas en prosa con el nombre de nove¡las, han roto a escribir cuentos, como si en la vida hu¡bieran hecho otra cosa. Creen que es más modesto el papel de cuentista y se atreven con él sin miedo. Es una aberración. El que no sea artista, el que no sea poeta, en el lato sentido, no hará un cuento, como no hará una novela " . Clarín proyectó su ética y su estética, su voluntad crea¡dora, por el camino de las novelas cortas y de los cuentos largos. Se inscribe, así, Clarín en las coordena¡das del ámbito literario de la nouvelle europea de fina¡les del siglo XIX. Las novelas cortas de Leopoldo Alas serías explicables en un contexto similar a las de Maupassant o Chéjov.